PUIG AGUILERA-3 MOLLONS-CASTELL LA POBLA (TRES PICS) 1-9-13

Llaneros: Cuñao-Discreto-Crack

Esta crónica está basada en hechos reales.

Transcurría el año 2013 D.C. .Era una época gris y convulsa, debido a la crisis del momento.
Todo comenzó un día a finales de verano después de no poder ir a otra expedición en tierras algo más lejanas.
El día anterior, como no podía ser de otra manera comenzaron los preparativos. Alguien dijo: donde vamos mañana ?, y otro contestó: Puig Aguilera-La Pobla, que tengo que volver pronto. Con estos parámetros se empieza a gestar la nueva expedición hasta altas horas de la noche; de esta manera no pudiendo velar armas todo el tiempo deseado.
Poco después del amanecer se juntaron los tres Llaneros con sus monturas y se dispusieron a comenzar la ruta desde el lugar acordado la noche anterior, La Masia.

Pasaron por una de las bodegas del reino Can Macia-Bohigas, para girar a la izq. pasado la balsa, por el camino ancho hasta pasado la casa, la granja, y la fuente de Can Ventallols a la derecha, por el camino principal.
Una vez coronado, se dirigieron a su primer objetivo El Puig Aguilera. Para dar fe de este momento un lugareño que transitaba por allí junto con su fiel Labrador, lo inmortalizo de esta forma.

                                                                    Puig Aguilera  
Deshicieron el camino andado hasta el cruce principal donde comenzaron un descenso pasando por debajo de la nueva Via del reino C 37, Ca N´Estrada, como apremiaba el tiempo no pudieron visitar La Ermita S.Feliu-Cal Monjo, y aliviaron su sed en la Font de la Puda, que está en el antiguo balneario del mismo nombre, donde la nobleza de Barcelona y alrededores venían y siguen viniendo para su reposo.











Tramo por la antigua NII y enfilaron entre el circuito y el campo de tiro; en estas rampas las monturas hacían ruidos quejándose del la tensión que se le sometía.
Después del  sufrimiento ya tenían a la vista el segundo objetivo, los 3 mollons, desde donde se divisaba su próximo destino La Pobla y en lo alto vigilante el imponente Castillo. Después de rendir culto  a la cruz, menos un diablo satanizado.

                                                                 3 Mollons
                 
Toca bajar; vuelven a sufrir las monturas, pero ahora por las rampas de bajada; las herraduras casi que terminaron gastándose; plaza con el pino en el medio y continuan bajando hasta La Pobla.
Lugar donde deciden dar buena cuenta de los pollos y pimientos de los huertos; en la venta del Reco del Ais. Disfrutando de estos manjares y caldos, no apetecía nada continuar con la ruta y aun menos al ver llegar aquella doncella rubia que todos pensaban que seria la hija del panadero ( que polvo tiene el camino y que polvo la panad....).

Tras saciar parte de su sed; la otra parte ya sabéis cual es la que no se sacio; se disponen a saldar cuenta con el ventero; alrededor de 8 Reales. Comienza la tertulia para decir el camino de vuelta, al final hay consenso y se decide que viendo que era un poco más de media mañana hay tiempo suficiente para hacer el 3 Pic, el Castillo de la  Pobla; no podian dejar pasar la oportinidad ya que estaban allí.
Con la panza llena pero a ritmo cansino se logra llegar al castillo. De esta guisa les vieron llegar y evidentemente no les abrieron las puertas. En el exterior una familia con su hijo pequeño que llevaba la camiseta con los colores del caballero mas conocido del reino (Messi), dio fe del momento.

                                                            Castell de la Pobla
Para no deshacer el camino hecho de vuelta uno de los llaneros dice de hacer una senda nueva que va por la parte de detrás, tuvieron que caminar durante 20-30m. con las monturas a rastras; esta senda termina llegando en bajada al cruce de arriba del Chatarrero. 
El camino de vuelta ya es conocido, depuradora y en la entrada del pueblo, cerca de la casa de otro llanero que no vino se separan para llegar cada uno a su morada.

Las crónicas del tiempo decían que recorrieron 35 Leguas, subieron hasta el cielo (900-1200), llegaron con tiempo suficiente para asearse y sentarte en la mesa con tiempo (como quedaron 1:05) y comentaron que terminaron con las piernas ardiendo. Pero decían que había sido tan agradable y tranquila como estar tumbado en el catre una tarde.